¿Cómo afectó la Federación a los vínculos con Inglaterra?

La federación de Australia en 1901 marcó un cambio significativo en la relación entre la recién formada Commonwealth de Australia e Inglaterra, que anteriormente había mantenido las colonias bajo su administración colonial. La federación provocó un cambio de poder y autonomía para Australia, lo que dio lugar a varios cambios clave:

1. Pasar de la dependencia colonial a la igualdad de estatus:

Antes de la federación, las colonias australianas se consideraban subordinadas al gobierno británico, con un autogobierno limitado. La Federación provocó la creación de un gobierno federal con una autonomía significativa, lo que permitió a Australia tomar sus propias decisiones en asuntos internos y exteriores.

2. Establecimiento de la identidad australiana:

La Federación marcó un momento decisivo en el desarrollo de una identidad nacional australiana distinta de ser súbditos británicos. La adopción de símbolos nacionales, como la bandera australiana, el escudo de armas y el himno nacional, fortaleció un sentido de unidad y orgullo entre la gente de la nueva Commonwealth.

3. Representación Independiente:

Con el establecimiento del gobierno de la Commonwealth, Australia obtuvo su propia representación en el escenario internacional. La creación del Departamento de Asuntos Exteriores de Australia y el nombramiento de un Gobernador General australiano, que representaba a la Corona británica, allanaron el camino para que Australia entablara directamente relaciones diplomáticas y acuerdos internacionales sin necesidad de la aprobación británica.

4. Vínculos comerciales y económicos:

La Federación no provocó de inmediato cambios significativos en las relaciones comerciales y económicas entre Australia e Inglaterra. Las colonias ya habían disfrutado de una relación comercial mutuamente beneficiosa con Gran Bretaña y estos vínculos continuaron después de la federación. Sin embargo, a medida que Australia desarrolló sus propias industrias y buscó mercados más amplios, diversificó gradualmente sus relaciones comerciales con otras naciones.

5. Políticas de inmigración:

La federación le dio a Australia un mayor control sobre sus políticas de inmigración. La introducción de la Política de Australia Blanca, que restringió la inmigración no europea, reflejó el deseo de Australia de mantener su carácter predominantemente europeo. Esta política se mantuvo vigente hasta finales de la década de 1960.

6. Conexiones reales y vínculos constitucionales:

Si bien Australia obtuvo autogobierno a través de la federación, mantuvo sus vínculos constitucionales con la monarquía británica. El monarca británico siguió siendo el jefe de Estado, aunque representado por el Gobernador General. El British Privy Council también siguió siendo el tribunal de apelación más alto para los casos australianos hasta 1986, cuando fue reemplazado por el Tribunal Superior de Australia como tribunal de apelación final.

En general, la federación de Australia reformó significativamente la relación de Australia con Inglaterra. Allanó el camino para el surgimiento de Australia como una nación independiente, con sus propias estructuras gubernamentales, símbolos, presencia internacional y políticas, manteniendo al mismo tiempo algunas conexiones culturales y constitucionales con su herencia británica.