¿Por qué las corrientes oceánicas profundas también se llaman corrientes termohalinas?

Las corrientes oceánicas profundas también se conocen como corrientes termohalinas porque son impulsadas por diferencias de temperatura y salinidad (halinas) en las aguas oceánicas. Estas diferencias de temperatura y salinidad afectan la densidad del agua del océano, provocando que se mueva.

Las corrientes termohalinas desempeñan un papel fundamental en la circulación oceánica global al transportar calor y sal por todo el mundo. Son responsables de la redistribución del calor de los trópicos a las regiones polares, influyendo así en el clima de diferentes partes de la Tierra.

La palabra "termohalina" se deriva de los términos griegos "thermos" (calor) y "halos" (sal). Se refiere a los efectos combinados de la temperatura y la salinidad sobre la densidad del agua de mar.

Aquí hay una explicación más detallada de cómo la temperatura y la salinidad afectan las corrientes oceánicas:

Temperatura: El agua más cálida es generalmente menos densa que el agua más fría porque el aumento de temperatura hace que las moléculas de agua se muevan más rápido y ocupen más espacio. Como resultado, las corrientes oceánicas cálidas tienden a elevarse y moverse hacia la superficie.

Salinidad: El agua más salada es más densa que el agua más dulce porque los iones de sal disueltos aumentan la masa del agua. Por lo tanto, las corrientes oceánicas de alta salinidad tienden a hundirse y moverse a lo largo del fondo del océano.

Cuando se combinan, estas diferencias de temperatura y salinidad crean variaciones de densidad en el agua del océano, lo que lleva a la formación de corrientes termohalinas.

El ejemplo más destacado de corriente termohalina es la cinta transportadora global, también conocida como circulación de vuelco meridional. Es un patrón de circulación oceánica a gran escala que transporta agua superficial cálida desde los trópicos a las regiones polares y agua fría y profunda desde los polos de regreso a los trópicos. Las fuerzas impulsoras detrás de esta circulación global son las diferencias de temperatura y salinidad entre las diferentes partes del océano.