Viajes       https://es.bhlyqj.com

¿Cómo eran los alrededores de un castillo?

El área circundante de un castillo a menudo estaba fuertemente fortificada, con múltiples capas de defensa para proteger el castillo de ataques. Estas fortificaciones podrían incluir:

- Paredes exteriores: Éstas constituían la primera línea de defensa y normalmente estaban hechas de piedra o ladrillo. A menudo eran muy altos y gruesos, y a menudo estaban equipados con torres y puertas.

- Foso: Un foso era una fosa llena de agua que rodeaba el castillo. Esto dificultó a los atacantes llegar al castillo y también proporcionó una fuente de agua para los habitantes del castillo.

- Puente levadizo: Un puente levadizo era un puente que podía subirse o bajarse para permitir el acceso al castillo. Cuando se levantó, el puente levadizo hizo imposible que los atacantes entraran al castillo.

- Rastrillo: Un rastrillo era una puerta pesada que se podía bajar desde el techo para bloquear la entrada al castillo.

- Agujeros de asesinato: Los agujeros de asesinato eran pequeños agujeros en el techo que permitían a los defensores arrojar objetos a los atacantes que estaban debajo.

Además de estas fortificaciones, los alrededores de un castillo a menudo se limpiaban de árboles y otros obstáculos que pudieran proporcionar cobertura a los atacantes. Esto dificultaba que los atacantes se acercaran al castillo sin ser vistos.

Los alrededores del castillo también se utilizaban a menudo con fines agrícolas, ya que el castillo necesitaba una gran cantidad de alimentos para sustentar a sus habitantes. Cerca del castillo a menudo se encontraban campos, huertos y jardines, que a menudo eran atendidos por los siervos del castillo.