¿Cuáles son las leyes de autodefensa en Nuevo México?

Las leyes de autodefensa de Nuevo México se encuentran en el Capítulo 30, Artículo 2 de los Estatutos Anotados de Nuevo México (NMSA). A continuación se proporciona un resumen de las leyes de autodefensa de Nuevo México:

Uso de la fuerza:

- Una persona puede utilizar la fuerza razonable y necesaria en defensa propia o de otros.

Definición de fuerza razonable:

- La determinación de la fuerza razonable se basa en varios factores, entre ellos:

- Naturaleza e inminencia del peligro.

- Gravedad del daño amenazado o infligido

- Medios de defensa elegidos

Inmunidad procesal:

- Una persona es inmune a un proceso penal por usar fuerza letal en defensa propia si:

- Creían razonablemente que la fuerza letal era necesaria para evitar una muerte inminente o daños corporales graves a ellos mismos o a otra persona.

- No estaban participando en actividades delictivas en el momento del incidente.

Deber de retirarse:

- Nuevo México no tiene el deber general de retirarse antes de usar la fuerza en defensa propia. Sin embargo, si una persona puede retirarse de forma segura sin aumentar su propio peligro o el peligro para los demás, se le puede exigir que lo haga antes de recurrir a la fuerza letal.

Defensa de la Propiedad:

- Una persona puede utilizar la fuerza razonable y necesaria para proteger su propiedad, pero la fuerza letal sólo podrá utilizarse si es necesaria para evitar una muerte inminente o grandes daños corporales.

Defiende tu posición:

- Nuevo México no tiene una ley explícita de "defender su posición". Sin embargo, las leyes de autodefensa del estado generalmente permiten que una persona use la fuerza para defenderse contra una amenaza inminente, independientemente de si se encuentra en su propia propiedad o en un lugar público.

Es importante tener en cuenta que las leyes de autodefensa pueden ser complejas y el resultado de cualquier caso de autodefensa depende de los hechos y circunstancias específicos de la situación. Si está involucrado en una situación de defensa propia, es esencial consultar con un abogado defensor penal con experiencia para analizar sus derechos y opciones.