¿Cuál es el tiempo promedio para alcanzar la cima del monte Everest?

El tiempo que lleva alcanzar la cima del Monte Everest puede variar dependiendo de varios factores, incluida la experiencia del escalador, su estado físico, las condiciones climáticas y la ruta elegida. En promedio, se necesitan entre 40 y 60 días desde que los escaladores llegan a Nepal o al Tíbet hasta que alcanzan la cumbre y regresan al campamento base.

Aquí hay una cronología general de una expedición típica al Monte Everest:

1. Llegada y Aclimatación: Los escaladores suelen pasar la primera o segunda semana en Nepal o el Tíbet aclimatándose a la gran altitud. Esto implica ascender y descender gradualmente a elevaciones más altas para permitir que el cuerpo se acostumbre al aire.

2. Campamento base: Los escaladores establecen su campamento base a unos 5.364 metros (17.598 pies) en la cascada de hielo de Khumbu. Esto sirve como centro principal de la expedición y lugar para que los escaladores descansen y se preparen para el ascenso.

3. Campamentos Intermedios: A medida que los escaladores se aclimatan más, establecen una serie de campamentos intermedios en elevaciones más altas. Estos campamentos sirven como puntos de descanso y lugares para almacenar suministros. Los campamentos intermedios más habituales son:

- Campo I:5.944 metros (19.501 pies)

- Campo II:6.492 metros (21.299 pies)

- Campo III:7.162 metros (23.500 pies)

- Campo IV:7.925 metros (26.001 pies)

4. Impulso a la cumbre: El empujón final hacia la cumbre suele comenzar en el Campo IV. Los escaladores comienzan su ascenso temprano en la mañana, con el objetivo de llegar a la cima antes del anochecer. El ascenso a la cumbre y el descenso de regreso al Campo IV suele tardar entre 16 y 18 horas.

5. Descenso: Después de llegar a la cumbre, los escaladores comienzan el descenso, deteniéndose en varios campamentos intermedios a lo largo del camino.

6. Regreso al campamento base: Finalmente, los escaladores regresan al campamento base, marcando el final de su expedición.

Es importante tener en cuenta que el cronograma puede variar significativamente según el ritmo de cada escalador, las condiciones climáticas y cualquier circunstancia imprevista que pueda surgir. Algunos escaladores pueden tardar más en aclimatarse o enfrentar retrasos debido al mal tiempo o enfermedades relacionadas con la altitud. Además, el tiempo pasado en la montaña puede verse influenciado por factores como la experiencia, la elección de la ruta, la dinámica del equipo y la logística general de la expedición.