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¿Cómo era la vida de la gente de la misión de san Fernando?

Vida diaria

El día para los indios de la misión comenzaba al amanecer. Se reunían para las oraciones de la mañana y luego salían a realizar diversas tareas. Las mujeres prepararon los campos para sembrar y recoger las cosechas. Cuidaban el ganado de la misión y cocinaban, limpiaban y cosían para sus familias y los frailes. Los hombres cazaban, pescaban y construían casas y otras estructuras para la misión. Recogían leña, regaban las plantas y hacían trabajos de carpintería y albañilería.

Cada persona en la misión tenía su propio rol y responsabilidades específicas, y se esperaba que trabajaran duro y obedecieran a los frailes.

Los niños asistían a la escuela en la misión, donde aprendían sobre la fe católica, así como conocimientos básicos de lectura, escritura y aritmética. También aprendieron habilidades prácticas, como agricultura y carpintería, que les ayudarían a sobrevivir en la comunidad misionera.

Los indios de la misión vivían en pequeñas casas de una sola habitación, hechas de adobe o madera. Dormían sobre esteras o pieles de animales y comían comidas sencillas a base de maíz, frijoles y calabazas. A menudo andaban descalzos y vestían ropa sencilla hecha de algodón o lana.

Vida Religiosa

La fe católica era fundamental para la vida en la misión. Los indios debían asistir a misa todos los días y participar en rituales y ceremonias religiosas. También se esperaba que confesaran sus pecados a los frailes y recibieran la comunión con regularidad.

A pesar de los esfuerzos de los frailes por imponer las creencias católicas, algunos de los indios continuaron practicando sus creencias religiosas tradicionales. A menudo combinaban rituales católicos con sus ceremonias tradicionales y adoraban en secreto a sus antiguos dioses y diosas.

Vida social

Los indios de la misión vivían en una comunidad muy unida. Se ayudaban mutuamente con su trabajo y compartían comida, ropa y refugio. También celebraron juntos días festivos y eventos especiales.

Los indios tenían un fuerte sentido de comunidad y eran ferozmente leales a su misión. Estaban orgullosos de ser parte de la comunidad misionera y agradecidos por la protección y guía de los frailes.

Desafíos y Dificultades

La vida en la misión no siempre fue fácil para los indios. A menudo tenían exceso de trabajo y eran sometidos a duros castigos por desobedecer a los frailes. También padecían enfermedades, desnutrición y otros problemas de salud.

A pesar de los desafíos, los indios de la misión resistieron. Se adaptaron a la nueva forma de vida y encontraron formas de preservar su cultura y tradiciones. También lograron encontrar alegría en sus vidas y estaban agradecidos por la oportunidad de vivir en la comunidad misionera.

La Misión de San Fernando es un recordatorio de la compleja y desafiante historia del sistema de misiones en California. También es un testimonio de la resiliencia y la fuerza del pueblo nativo americano.